Ayer Naia nos sorprendía al llegar a la guarde. Por primera vez entró contentísima!!. Ni una protesta ni un lloro. Incluso alargó los brazos a la cuidadora para irse con ella y nos dijo adiós con una sonrisa. Y no sé quien era más feliz en ese momento, sí nosotros o ella. Hoy ha sido aun mejor, ella misma ha entrado corriendo dentro de la guarde con una alegría que daba gusto verla. Y con razón!. Ya nos han dicho las profesoras que se lo pasa muy bien e incluso es un poco trasto.
Es asombrosa la capacidad de adaptación que tienen los niños. En solo un mes ha pasado de entrar llorando como una magdalena, a entrar corriendo súper feliz. Ya me lo dijo una amiga mía que es profesora de niños de dos años. Al final, no hay ni un solo niño que no se adapte. Pueden hacer el paripé de delante de su padres, pero en cuanto estos se dan la vuelta, se acaban las lagrimas y se integran con los demás niños.
Supongo que será igual para todo. Para educar a un niño y llevarle por el camino que quieres solo hace falta ser constante y perseverante. Al principio cuesta pero con paciencia y disciplina al final los niños siempre se adaptan. Así ha sido en todos los cambios que ha tenido en sus diferentes etapas. Ahora que la niña come bien, se queda contenta en la guarde y con sus abuelas, y ya no llora casi nunca. Solo nos queda una asignatura pendiente. El dormir. Fallo nuestro lo reconozco habrá que ponerse duros de una vez por todas y dejarnos de excusas tontas. Ya os contaré si progresamos.
Un saludo
Amatxu de Miribilla
Es asombrosa la capacidad de adaptación que tienen los niños. En solo un mes ha pasado de entrar llorando como una magdalena, a entrar corriendo súper feliz. Ya me lo dijo una amiga mía que es profesora de niños de dos años. Al final, no hay ni un solo niño que no se adapte. Pueden hacer el paripé de delante de su padres, pero en cuanto estos se dan la vuelta, se acaban las lagrimas y se integran con los demás niños.
Supongo que será igual para todo. Para educar a un niño y llevarle por el camino que quieres solo hace falta ser constante y perseverante. Al principio cuesta pero con paciencia y disciplina al final los niños siempre se adaptan. Así ha sido en todos los cambios que ha tenido en sus diferentes etapas. Ahora que la niña come bien, se queda contenta en la guarde y con sus abuelas, y ya no llora casi nunca. Solo nos queda una asignatura pendiente. El dormir. Fallo nuestro lo reconozco habrá que ponerse duros de una vez por todas y dejarnos de excusas tontas. Ya os contaré si progresamos.
Un saludo
Amatxu de Miribilla
3 comentarios:
¡Hola! Yo también tengo un niño de 20 meses, Iban. No es que duerma superbien pero tampoco me molesta. Si te consuela, y sin necesidad de perseverar, Naia dormirá bien sobre los tres años (más o menos). Lo normal es que los bebés no duerman (la que te diga que tiene niños tranquilos... pues me gustaría conocerla y estar en su casa por las noches para comprobarlo, y si tiene buena suerte, pues enhorabuena). De todos modos, te recomiendo la web www.dormirsinllorar.com y en lugar de Estivill, lee a Rosa Jové y a Carlos González. Yo cambié el rumbo nada más leer "Bésame mucho" de éste último (yo siempre había sido de las de la "vía dura"). Si te animas ya me contarás...
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De momento voy a volver a intentarlo con el Metodo Estivill. Mi niña es muy lista y tiene muchas mañas cogidas y por las buenas tenemos comprobado que es perder el tiempo. De todas formas echaré un vistazo al libro
Muchas gracias y un saludo
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