martes, abril 17

23 meses: Avances recientes

Hay que ver en poco mas de 15 días lo que ha avanzado Naia... Lo más significativo es en el LENGUAJE. Ha empezado a preguntar cosas de todo tipo!!!:¿Qué es eso? ¿Qué hace Aita? ¿Qué come Ama?¿Dónde va Aitite? ¿Dónde esta la tía?... Es muy divertido saber lo que está pensando, y poder solucionarle todas sus dudas y “pequeñas inquietudes”. Ya se ve que ha salido a mi de curiosa, porque al igual que yo de pequeña, TODO lo quiere saber, y a mí me encanta poder ayudarla.

Además ya puedo mantener una conversación con ella, más o menos coherente y me encanta. Ya tenia ganas de que este momento llegara!!!

Otro avance muy importante, sobre todo para sus padres es que ya duerme en su cama sola, SII!!! Lo conseguimos!!! Después de soportar reproches y risas de todo el mundo porque dormía entre nosotros (Era normales ya los comentarios de “así como vais a darle un hermano...” o “cuando tenga 18 años y tenga novio no vais a caber en la cama...”), ya podemos decir que tenemos un problema menos.

Empezamos poco a poco, primero la llevamos a su cama y la acompañábamos en una silla su padre o yo. No habia forma de que se durmiera... Incluso le di Kindival, un medicamento homeopático que me recomendó la pediatra sustituta y no sirve para nada (12 euros tirados a la basura). Terminé metiéndome con ella en su cama hasta que se durmiera. Pensaba hacerle otra vez el Método Estivill y empezar un fin de semana que estuviera descansada, pero no hizo falta. Un día que me tenía muy harta porque no hacia mas que dar vueltas en la cama y yo estaba cansadísima, la deje ahí sola. Ella estuvo llorando 10 minutos, hasta que se calló. No se durmió al momento, pero aguantó en su cama sin decir nada, hasta dormirse. Por la noche se despertó pero no la hicimos ni caso y se volvió a dormir sola. Así hasta hoy. Ahora protesta un poco al dejarla en su cama pero enseguida se calla y se duerme de un tirón. Nosotros aun estamos que ni nos lo creemos y ella ya dice que duerme en su cama sola “como una chica mayor

Con todo esto he sacado una conclusión. No vale ser blandos, ni ir por las buenas, porque te cogen la sobaquera. Lo mejor es cortar de raíz, que los niños enseguida se acostumbraran a todo y no les supone ningún trauma. Porque por las mañanas se despierta igual de contenta que antes.

Por ultimo también le he quitado el bibe de la mañana. Ahora desayuna como yo, leche, cereales, y zumo de naranja. Es mucho más incomodo porque tarda 1 hora y me lo pone todo perdido, pero así usa la cuchara como los adultos y le empezamos a quitar las tetinas (se recomiendan no usar a partir de los 2 años porque pueden deformar el paladar)

Ahora falta que use el orinal y quitar el “tete” (Solo se lo consiguen quitar los abuelos y en la guarde), pero no me agobio, se irá haciendo poco a poco. Lo más importante esta conseguido. Eso sí, si vuelvo al pediatra y está la sustituta otra vez habrá que esconderle el tete, para no volver a oír frases como “quien se niega a que crezca ¿la hija o la madre?”. Pobre, no le vamos a quitar todo lo que le gusta de repente... además, como si fuera tan fácil dejar un vicio!..., sino que se lo pregunten a los fumadores!!!

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Amatxu:

En mi familia, mi abuela, tenía un "truco" para quitarnos el chupete, era meter un trocito de queso (duro) en la tetina, en un par de días dejan el chupe porque empieza a saber mal y ellos mismo no lo quieren.
Espero que te funciene, con mis primos si dió resultado. Ya verás como en unos meses tienes a toda una señorita en casa.
Besines, Maria

Anónimo dijo...

Hola:
¿No os vais a animar a ir a por el segundo?

Amatxu de Miribilla dijo...

Je, je... la pregunta del millón... Antes todo el mundo te pregunaba a ver cuando ibamos a por el primero, ahora a por el segundo... Ahí estamos pensandolo, a ver si nos decidimos pronto. Yo siempre digo al que me pregunta que antes tengo que domar a la fiera ;-)

marijaia_bilbao dijo...

Yo tuve "tete" hasta los 3 ó 4 años. Mi amatxu un buen día me dijo que se había caído al retrete y hasta hoy. Sin traumas.