A la vez que Naia aprendió a decir “agua”, “chichi” o “pecaó”, aprendió también a pedir chocolate. “Bom-bom” suele decir o “tina” (para las chocolatinas). “Hija, has salido tan golosa como tu madre”, dice el padre, echándole a una servidora las culpas... Que manía tiene mi entorno de culpar a la genética de los malos hábitos de la niña... Lo que no dice el papá es que en casa siempre hay bombones, y que es él el que se encarga de traerlos del supermercado y de dárselos a Naia habitualmente.
No hemos tenido discusiones por eso... Él intenta quitar hierro al asunto, y le dice a Naia entre risas “Hija, que madre mas bruja tienes que no te quiere dar ni un caprichito!!”. Pero una cosa es un capricho de vez en cuando y otra es a diario. “¿Es que a ti tu madre te daba bombones todos los días?", le suelo responder yo. Mi suegra ya me ha corroborado que no, y por lo menos está de acuerdo conmigo que su hijo es demasiado blando con la niña.
Al menos ahora después de tanto insistir ya no le da chocolate a diario. Pero eso no quiere decir que Naia no coma cosas que no debe, porque tiene un séquito detrás para darle golosinas... Esta el aitite que le guarda las chocolatinas de café, el abuelo con el paquete de Aspitos diario, y la peor de todas, la tía-abuela que es como una niña, y le trae las golosinas por bolsones (A ver si le traen pronto nietos para que se las lleve a ellos)
Y ahí tengo que estar yo peleando, para esconderle las cosas que le traen (por lo menos hasta que coma su comida) aunque Naia tiene cada vez mas memoria y recuerda muy bien que en la bolsa la silla alguien ha dejado golosinas... Y como siempre la mala yo... Pero eso es lo que me toca si quiero educar bien a la niña...
¡¡¡Para que luego digan que las madres somos unas histéricas con la alimentación!!!
No hemos tenido discusiones por eso... Él intenta quitar hierro al asunto, y le dice a Naia entre risas “Hija, que madre mas bruja tienes que no te quiere dar ni un caprichito!!”. Pero una cosa es un capricho de vez en cuando y otra es a diario. “¿Es que a ti tu madre te daba bombones todos los días?", le suelo responder yo. Mi suegra ya me ha corroborado que no, y por lo menos está de acuerdo conmigo que su hijo es demasiado blando con la niña.
Al menos ahora después de tanto insistir ya no le da chocolate a diario. Pero eso no quiere decir que Naia no coma cosas que no debe, porque tiene un séquito detrás para darle golosinas... Esta el aitite que le guarda las chocolatinas de café, el abuelo con el paquete de Aspitos diario, y la peor de todas, la tía-abuela que es como una niña, y le trae las golosinas por bolsones (A ver si le traen pronto nietos para que se las lleve a ellos)
Y ahí tengo que estar yo peleando, para esconderle las cosas que le traen (por lo menos hasta que coma su comida) aunque Naia tiene cada vez mas memoria y recuerda muy bien que en la bolsa la silla alguien ha dejado golosinas... Y como siempre la mala yo... Pero eso es lo que me toca si quiero educar bien a la niña...
¡¡¡Para que luego digan que las madres somos unas histéricas con la alimentación!!!
Un saludo, y feliz fin de semana
1 comentario:
No se pq los hombres tienen fama de duros, son unos blandengues, al menos con l@s hij@s. Luego a la amatxu le toca educar al niñ@ y al padre para que no te le malcrie.
Javi tb le dice que soy una bruja.
Un besito, Yolanda
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